Estos días puede verse en la UCE del cole una maqueta gigante de Pamplona en la que no falta ningún detalle. En su elaboración ha participado todo el alumnado y el profesorado de UCE y el resultado no podría ser más bonito, pero también muy práctico.

La maqueta forma parte de la unidad Con Muévete, que surgió a partir de una situación concreta en la que una persona se equivocó de autobús para ir a su casa. De repente, pasados diez minutos del trayecto, comenzó a darse cuenta de que el autobús no estaba haciendo la misma ruta habitual de todos los días. No le sonaba ningún edificio, parques, calles… y empezó a sospechar que «algo no iba bien». Al no llevar móvil, no podía hacer nada. A partir de este momento de pánico y confusión, se creó esta unidad porque en la UCE se trabaja para crear situaciones de aprendizaje a partir de sus contextos, cargados de significado para todos.

En ellos, el alumnado puede desarrollar recursos para hacer frente a los retos que puedan surgir de manera competente. Y estos retos suceden día a día en nuestra vida cotidiana. De esta forma, la unidad comenzó conociendo de primera mano los barrios más representativos para el alumnado, empezando por Ermitagaña, que es el barrio donde está situado el colegio. Así, se realizaron visitas al mercado, centro de salud, biblioteca, parroquia…

Después la UCE se desplazó a conocer Barañáin, donde vive Martín, uno de los alumnos. Él se encargó de enseñar al resto su casa, el mercado habitual que ponen los martes, el lago, la fábrica Volkswagen… En definitiva, zonas representativas para ellos. 

Más adelante, la visita fue al barrio de San Jorge en el que viven dos de los alumnos. Allí conocieron sus casas, la estación de tren, los parques habituales que ellos frecuentan, etcétera. También viajaron al Soto. En esta zona visitaron sitios emblemáticos y llenos de significado para ellos -como el Parque de Alfredo Landa- y los servicios que ofrece.

Y, por último, recorrieron el II Ensanche. En este barrio, además de conocer los domicilios particulares, se hizo una visita guiada donde compartieron historias referentes al precioso Portal de Francia, la plaza de toros, la Catedral, o la calle Salsipuedes, entre otros lugares. Todos los barrios se dibujaron en plano, pero eso no era tan útil para ubicarse realmente. De ahí surgió la idea de hacer una maqueta en tres dimensiones.

Lo primero fue construir el río Arga de plastilina que vertebrase la ciudad. Un alumno quiso construir su casa, cerca de la estación de Renfe, y más adelante la propia estación. A otro chico le hacía ilusión construir el logo de la Volkswagen, donde trabaja su padre. 

De este modo, poco a poco han ido completando la maqueta de Pamplona y sus barrios habituales. Para ello han utilizado desde lanas, palillos, cartones reciclados, plastilina, ¡hasta un spontex, para simular la hierba verde! La mayoría de las propuestas de construcción las ha generado el propio alumnado, otras han ido surgiendo sobre la marcha.

Además del resultado final, que es maravilloso, se han trabajado distintas actitudes y competencias, como la curiosidad por conocer realidades distintas a las de cada uno, o los lugares más significativos de sus compañeros. La segunda, la humildad; humildad para aprender de otras personas por muy diferentes que sean o precisamente por ello. Otra habilidad es la tolerancia, que significa aceptar, escuchar puntos de vista u opiniones distintas o divergentes a las nuestras. También la flexibilidad, que es poder observar desde distintos ángulos para tener una visión más global de alguna cosa. Flexibilidad también para aceptar esas visiones e incorporarlas a las nuestras si resultan mejores.

Y, por último, la empatía, que supone reconocer que vemos sólo un fragmento de la realidad y además con las “gafas” de nuestras experiencias vividas. Sin embargo, somos capaces de ponernos las gafas de otros para fomentar la convivencia y el respeto.